Vamos allá con el repaso de rigor a las agrupaciones que actuaron anoche, sobre las tablas del Gran Teatro Falla, durante la última sesión de los cuartos de final.
- "El duende del Corralón": Parece que tenían ciertas esperanzas de pasar a las semifinales, los del coro de La Viña, y se han quedado bastante cerca de lograrlo, de hecho, pero a mí particularmente me volvió a parecer de lo más insípida y lacia, la verdad, la agrupación de estos señores, cuando la escuché de nuevo ayer por la noche. El conjunto de voces, además, me suena extrañísimo, queda confirmado, con unos graves impostados de vez en cuando por ahí que chirrían de mala manera y unos agudos que en más de una ocasión desafinan lo suyo, también. En cuanto a las letras que estrenaron anoche los coristas viñeros, las de los tangos destacaron por encima de las de los cuplés, lógicamente, con sendas críticas a la celebración del Bicentenario de La Pepa dentro de un par de años, cuando lo que de verdad merecería la pena celebrar sería que no hubiese más parados en Cádiz nunca más, y a la posible retirada en un futuro cercano de las barquillas de La Caleta, sin las cuales, como bien defendieron ellos, dicha playa perdería buena parte de su encanto y de su singular personalidad. En la tanda de cuplés, a su vez, destacó el segundo, sobre la construcción del nuevo puente y la satisfacción que le causa a la alcaldesa verlo crecer día tras día, en el que obviamente jugaron al equívoco, por encima del primero, sobre la cantante Hannah Montana, pelín bastorrillo en su remate, a mi entender. Que las nuevas coplas que nos presentaron ayer estos coristas no estuvieran nada mal, sin embargo, no fue suficiente como para que lograran acceder a las semifinales, como les anunciaba al principio, y me parece perfectamente comprensible, vaya, porque ya digo que a mí particularmente el coro en su conjunto no me convence en absoluto. Otra vez será, supongo, aunque insisto en que La Salle Viña quizá debería dejar de sacar agrupaciones, visto lo visto.
- "Los falsos": Mejoraron bastante con respecto a las preliminares, creo yo, el Love y compañía durante su segunda actuación, si bien no lo suficiente como para meterse ya, a estas alturas del concurso, en la lucha por la final. Eso sí, al menos pudieron resarcirse de esa primera intervención tan desangelada que tuvieron, dentro de la presente edición del certamen, ante un teatro medio vacío y un tanto apático, como consecuencia de haber cantado en una de las peores sesiones de todas las clasificatorias. Y es que el Falla anoche se encontraba, por el contrario, totalmente lleno y mucho más animado que la otra vez, con lo que el repertorio de estos veteranísimos chirigoteros de la capital quedó notablemente más lucido, sí señor, en todos los aspectos. En los pasodobles, más concretamente, hicieron reír al público, siguiendo la línea cómica por la que han optado este año en esta clase de piezas, con una primera letra sobre la llegada de su suegra a su casa, donde se muda a vivir la buena mujer para desesperación de todos ellos, y una segunda letra, aun mejor que la anterior, sobre lo que le explican a su esposa tras correrse una juerga con los amigos y aparecer a la mañana siguiente completamente borrachos y con unas bragas en la cabeza, mientras que en los cuplés, por su parte, destacó el segundo, poco más o menos que genial y muy inteligentemente escrito, acerca de lo que todo el mundo pensaba que era su perrita y que sin embargo acabó siendo, claro está, lo que todo el mundo pensaba que era en realidad, aunque el primero, sobre la cantidad de sitios desde los que nos llegan agrupaciones ya, con mucha guasa, también estuvo muy bien. Esperemos que en semifinales nos vuelvan a sorprender a todos con nuevas letras de esta misma calidad, que aunque ya lleguen tarde para luchar por la final, como les comentaba, siempre es un placer echar un rato tan divertido como este que pasamos anoche con los del Love, que por cierto, dicho sea de paso, tienen uno de los mejores estribillos de toda la modalidad, queda confirmado. Y lo de salir a escena a pecho descubierto, sin atrezzo ni forillo (por más que ayer sacaran uno todo churretoso a propósito, para pitorrearse de las críticas que les han llovido por ello), no puedo más que interpretarlo, por último, como una apuesta por las chirigotas sencillitas de toda la vida, frente a las que tanto se basan hoy por hoy en los montajes y en las parafernalias, más que en las coplas propiamente dichas, tipo la del Remolino y tal. El Love y los suyos, en fin, siempre poniendo las cosas en su sitio y dando lecciones incluso sin pretenderlo.
- "De estraperlo": No me entra en la mollera que una comparsa como esta, tan hortera y tan de guapitos, se haya quedado a las puertas de las semifinales por encima de muchas otras. Será el signo de los tiempos, imagino. Y eso que los chavales no lo hicieron malamente en su segunda actuación, no crean, con dos buenas letras de pasodoble, la primera en homenaje a la cantaora gaditana Mariana Cornejo y la segunda con un sentido lamento por la situación de su pueblo, Barbate, con el que dieron la voz de alarma acerca del peligro en el que se encuentra la industria de las almadrabas, y unos cuplés que sin ser la repera, por último, tampoco resultaron mucho peores que los que se suelen escuchar dentro de la modalidad. Pero vamos, que no, que a mí estas comparsas con tanto bailecito y tanto contoneo, y tan poco gaditanismo, no me interesan lo más mínimo. Aunque sean las que más se lleven, por desgracia.
- "La alegría de la güerta": Aunque el cuarteto de Algeciras cuajó una buena actuación en general ayer por la noche, creo que se confirmó que este año aspiran, como mucho, a llegar a la final. Vamos, que no les veo peleando por el primero, no. El cambio de dos de los componentes, definitivamente, le ha restado brillo y gracia al grupo, cuyo carisma recae ahora casi por completo sobre el amigo Rebolo, al mismo tiempo que lo de los hermanos estos a los que interpretan dos de los integrantes del cuarteto, que hablan como si fueran una sola persona, resulta ciertamente original, no lo niego, pero a la vez empobrece notablemente las posibilidades del repertorio al tener un único personaje, como quien dice, donde podría haber dos, cada uno con su peculiar carácter, lo que daría algo más de juego, a buen seguro, a la hora de escribir las parodias y demás. Tener un único popurrí que repiten en todas sus actuaciones, en lugar de un tema libre distinto cada vez, tampoco creo que les vaya a ayudar mucho, por otro lado, de cara a la competición, puesto que ese tipo de cosas también las valorará el jurado, digo yo. Sea como sea, y dejando al margen el lugar en el que finalmente queden dentro de la clasificación, repito que anoche tuvieron una actuación bastante agradable, a pesar de todo lo dicho, con una divertida parodia en la que la rústica Socorro y sus hermanos se cruzaron con un moreno, tema delicado, y acaso innecesario, pero que estos algecireños manejaron sin caer en la ofensa en ningún momento, así como con dos cuplés, muy simpáticos ambos, acerca de los nuevos scaners de seguridad que podrían instalar próximamente en los aeropuertos, el mejor de ellos, y sobre las bombillas de bajo consumo, tan ecológicas, el otro, y el citado popurrí, que no por repetido, ojo, dejó de hacer reír al respetable. Si se crecen un poquito más y se superan en semifinales, en definitiva, pueden asegurarse el pase a la final; en caso contrario, si flaquean lo más mínimo, podrían llegar a quedarse fuera. Confiemos en que no sea así.
- "Los naturales (como mi mare me parió)": Si les digo la verdad, miedo me da un jurado que deja fuera de las semifinales a una chirigota como esta, tan fresca, tan divertida, tan desenfadada y tan original, para meter en cambio a una mediocridad del calibre de "El submarino amarillo", de Manolito Santander. Que no es que la agrupación de estos chavales, a ver, esté para pasar a la final, pero un buen papel seguro que habrían hecho durante la tercera fase del certamen. Exactamente igual que lo hicieron anoche, vaya, en los cuartos de final, con una actuación de lo más amena y agradable. Los pasodobles, cuya música me sonó algo mejor que en preliminares (aunque sigo pensando que las composiciones de Bienvenido no le pegan demasiado a este grupo), los dedicaron a rendirle un merecidísimo homenaje a las chirigotas del Selu y del Love, el primero de los dos (en el que me sobró, eso sí, lo de solicitar que Cornejo y compañía sean nombrados pregoneros el año que viene, que se están empezando a hacer un poquito cansinas todas estas peticiones), y a muchas de las cosas que andan fallando últimamente en el concurso, según estos jóvenes chirigoteros de la capital, el otro (sobra decir que con algunas de las cuestiones que plantearon en esta última letra estoy de acuerdo, pero con otras no tanto), mientras que los simpáticos cuplés, por su parte, giraron en torno a cierta novia china que se habían echado recientemente los naturistas estos, en primer lugar, y en torno a la cumbre de ministras europeas celebrada aquí en Cádiz estos días atrás, después, un tema de ultimísima hora con el que "Los naturales" supieron demostrar sus buenos reflejos y su pronta capacidad de reacción. Quizá la tanda de pasodobles pecara de resultar demasiado endogámica, con dos letras relacionadas con el propio concurso y con el Carnaval, y tal vez los cuplés no fueran los mejores que se hayan escuchando este año, dentro de la modalidad, pero con eso y con todo, en fin, considero que deberían haber pasado a las semifinales estos chavales capitaneados por Juan Antonio Canet. Ojalá que otro año tengan más suerte.
- "Los galácticos": Otra agrupación a la que los cuartos le vinieron algo grandes, visto lo visto, pese a que en preliminares dejara un buen sabor de boca. La chirigota del Toté y compañía tuvo una actuación cuando menos digna, aun así, dentro de esta segunda fase del concurso, aunque flaqueara bastante tanto en los pasodobles, sobre todas las agrupaciones que cantaron en el día de ayer, el primero de los dos, con mención especial para Pedro el de los Majaras (al que solicitaron que se nombre pregonero el próximo Carnaval, sí), y sobre la monarquía, con una crítica hacia dicha institución, el segundo, como en los cuplés, normalitos tirando a reguleros, acerca de las diversas gripes animales que hemos ido conociendo estos últimos años, uno, y acerca de Toni Rodríguez, el de Onda Cádiz Televisión, el otro. El Carnaval que viene, en fin, esperemos que vuelvan a ganarse el pase a cuartos, estos chirigoteros de Puerto Real, pero con una mayor calidad, a ser posible, para poder lucirla debidamente en dicha fase.
- "Medio siglo": Supongo que lo podría decir de mil maneras distintas, pero paso de calentarme la cabeza, la verdad. Dejémoslo, pues, en que no me gustaron nada de nada los dos pasodobles que cantó ayer la comparsa de Pedro, el primero por oportunista y el segundo por ridículo. Lo del primero creo que ya lo explicó perfectamente el Gago, por lo visto, comentando la actuación de esta agrupación ante los micrófonos de Punto Radio: "Si quieren organizar una gala benéfica y recaudar fondos para Haití pues que lo hagan, pero que no vengan contándolo en un pasodoble como este para poner en pie al teatro". Algo así vino a decir, por lo que me contaron, este conocido cuartetero, y no puedo más que darle la razón, sinceramente, añadiendo que me hizo muchísima gracia ver a gente como Pedro o Ramoni criticando los pasodobles que tradicionalmente se le han hecho siempre a los muertos, cuando ellos dos se han hinchado a cantar letras de ese tipo a lo largo de su carrera, como bien sabemos todos, y a mucha honra, además, que no sé a qué coño viene ahora tanto renegar de su pasado como copleros. En lo que respecta al segundo pasodoble, por otra parte, soy consciente de que la problemática que abordaron en él existe y está ahí, con lo que es perfectamente susceptible de ser tratada en una copla de Carnaval, pero la verdad es que no puedo evitar que se me antoje, pues eso, ridículo y grotesco, el oír hablar de gente que se agrega al msn y tal en una letra como esta, tan sumamente dramática para colmo, y además cantada por alguien como el propio Pedro, que lo mismo ni siquiera sabe manejar un ratón de ordenador, el buen hombre. El tema, pues, me parece más o menos válido, pero la forma en que lo desarrollaron en este último pasodoble suyo va a ser que no. En los cuplés, cuya música me sigue pareciendo de lo mejorcito de toda la comparsa, por cierto, tuvo su gracia el segundo, sobre las pocas chicas que les llaman al móvil, pero no así el primero, bastante chusco, sobre el futurible polígono industrial de las Aletas. Y con el popurrí, en último lugar, demostraron que está muy bien hecho y tal, pero que tampoco es para tanto, vaya. Los seguidores de la comparsa, eso sí, trataron de iniciar otra vez el consabido "otra, otra, otra", más ensayado que el propio repertorio de la agrupación, pero en esta ocasión no les siguió ni Cristo, con lo que se quedaron completamente solos. Como ocurrió anteriormente con los de Bienvenido, en resumidas cuentas, tras la segunda actuación de Pedro y los suyos, notablemente más floja que la de preliminares, ya no está tan claro que vayan a colarse en la final. Pobres; con la de ilusiones que se habían hecho, me parece a mí, los angelitos.
- "Los que van por derecho": Sensacional, sí señor, el segundo de los cuplés que cantó anoche la chirigota del Vera. No sé si será el mejor que se ha cantado hasta ahora dentro del concurso, como afirmó Paco Rosado, pero desde luego sí que ha sido el más aplaudido y jaleado de cuantos se han podido oír este año, sobre las tablas del Gran Teatro Falla. En realidad, creo que es uno de los cuplés más aplaudidos y jaleados que he escuchado en mi vida, sin más, tanto rugía el público ayer por la noche en el templo de los ladrillos coloraos tras su interpretación. Más que porque resultara gracioso, como ya dije, por la gran verdad que encerraban sus palabras y por el arte con el que puso el dedo en la llaga, la de la progresiva apertura de nuestra fiesta a gente de otras poblaciones, y más concretamente de Sevilla, que después, sin embargo, no se muestran dispuestos a correspondernos en las suyas. Los jueces del Vera, en definitiva, dictaron sentencia anoche con este extraordinario cuplé en lo que respecta al distinto carácter de gaditanos y sevillanos, o lo que es lo mismo, de sus respectivas idiosincrasias y fiestas populares, y además lo hicieron sin faltar ni a la verdad ni a los propios sevillanos, sino solamente, pues eso, con la más dolorosa de las certezas por delante: "Yo te abro las puertas [...] pa que tú entres por la Caleta / Aquí tienes tu casa, pero te digo pa que lo sepas / que si voy a la Feria me dejes entrar en alguna caseta". Magistral. Eso sí, entre este cuplé y el pasodoble de preliminares no sé yo si se van a ir juntas al campo, para pasar una bonita jornada de convivencia, la chirigota del Vera y la de "Los pre-paraos", que no me cabe duda están, en buena medida, en la génesis de esta letra. Lo malo de todo esto, pasando ya al resto de la actuación, es que de no ser por ese genial segundo cuplé, y por el magnífico popurrí que traen este año estos chirigoteros de la capital, les hubiera quedado un pase más bien normalito, me parece a mí, al Vera y a los suyos. El primer pasodoble, sobre el maltrato y los maltratadores, se me antojó un poquito chorra, la verdad, por la pamplina esa de convertir ahora de repente todo lo positivo en femenino, solo para buscar el aplauso de las mujeres (aunque imagino que cabe aceptarlo, siquiera a regañadientes, como una licencia poética), mientras que el segundo no le anduvo a la zaga, a mi juicio, en ese sentido, al mezclar sin razón aparente una crítica a la política militar del gobierno en Afganistán con otra a la monarquía. Qué manía que tienen algunos, en fin, de rebujarlo todo en las coplas, por mucho que no venga a cuento. Y en lo relativo al primer cuplé, el de las pastillitas para endulzar el semen y las torrijas que se terminaba comiendo la suegra, lo cierto es que resultó de lo más normalucho, en mi opinión, rozando incluso lo regulero. Si los de Vera Luque de verdad pretenden luchar por el primero y no quieren conformarse con un puesto en la final, en resumidas cuentas, más vale que se vayan poniendo las pilas con el tema de las letras, ahora durante las semifinales.
- "EL G-15": El primer pasodoble trató sobre los aficionados al Carnaval que siguen la fiesta desde fuera de Cádiz y que se han llegado a enamorar de nuestra ciudad a través de las coplas. Si no fuera porque ya se han escuchado bastantes letras similares, en anteriores ediciones del concurso, no habría estado del todo mal. El segundo, por su lado, nos trajo otra de esas telenovelas que tanto les gusta escribir a los Carapapas últimamente sobre cualquier problemática social, cuanto más tremebunda mejor (y si no lo es tanto en realidad, ya se encargan ellos de que lo parezca), el maltratato a los padres por parte de sus propios hijos en este caso, narrada en primera persona, cómo no, y con final sorpresa incluido, para variar (que el Shyamalan, comparado con esta gente, no es más que un papafrita, ya lo dice un buen amigo mío). Sin comentarios. Los cuplés, tras el bochornoso interludio que la comparsa le casca al público en ese momento de su actuación, a través de la megafonía del teatro, con el omnipresente Ardentía como desafortunado invitado estelar, versaron, en último lugar, sobre la agresión a Berlusconi, uno, y sobre el alijo de coca que la policía descubrió hace poco oculto en cierto cargamento de plátanos, el otro. Y ya está. Paso de perder ni un segundo más con esta comparsa que no sé qué carajo hace en semifinales.
- "Los que no se enteran": No termino de entender que tanta gente haya comentado que ayer estuvieron flojitos los del Selu, por más que la presentación, cierto es, la interpretaran peor y mascando más letra que en preliminares, y aunque flaquearan un tanto, asimismo, en los cuplés. Esto último, en fin, no debería extrañarle a nadie, puesto que siempre han sido uno de los grandes puntos débiles del pregonero, más inspirado por lo general en las restantes piezas del repertorio, además de que los dos que cantaron, sobre las operaciones de cirugía estética de las famosas y sobre cierto chiquillo de buen comer, tampoco los encontré mucho peores, en realidad, que la mayoría de los que han cantado hasta ahora sus rivales más directos, salvo honrosas excepciones, claro está. A mí particularmente, pues, me pareció que tuvieron una actuación bastante buena en líneas generales, estos divertidísimos despistados, y con otros dos pasodobles extraordinarios, de propina. El primero, sobre los numerosos casos de corrupción descubiertos en diversas alcaldías de España a lo largo de este último año, lo vi finísimo, de una sutileza, una ironía y una inteligencia tremendas, al igual que me pareció de una finura exquisita, luego, el segundo, sobre los cruceros que llegan a Cádiz cargados de turistas de vez en cuando, con esa crítica tan mordaz dirigida hacia nosotros mismos y hacia el ridículo chauvinismo del que hacemos gala en ocasiones. Pasodobles ambos de risa, pues, pero con un importante trasfondo crítico detrás, que es como a mí siempre me ha gustado que se hagan este tipo de letras cómicas, por cierto, y no quedándose como tantas veces ocurre en el humor por el humor, que estará muy bien, no digo yo que no, pero que si viene acompañado de una cierta chicha, como en este caso, pues mejor que mejor. Por lo demás, tanto la presentación, como el estribillo y el popurrí, brillaron nuevamente con luz propia, con lo que sigo viendo a la chirigota entre los puestos más altos de la clasificación, a día de hoy.
Y eso es todo. Mañana por la noche empiezan las semifinales, así que veremos qué tal continúa la lucha de coplas en el Falla, a un paso tan solo ya de la final.
Un saludo.
|